La situación de emergencia ha generado la migración del modelo de aprendizaje tradicional, hacia un proceso de enseñanza - aprendizaje a distancia; el mismo que ha llegado para quedarse en las aulas de las escuelas, institutos y universidades que siguen aprendiendo día a día cómo crear el futuro de la Educación.

El e-learning, término que empleamos para referirnos a la educación virtual o formación online, se ha convertido en una herramienta potente e indispensable para continuar acercando aprendizaje a miles de estudiantes en el país, además de venir ganando terreno en los últimos años como una alternativa de educación con gran alcance y que permite complementar los planes de formación ya establecidos en los programas regulares, especialmente en educación superior. En este proceso, toda la comunidad educativa se adaptó y se sigue adaptando a este cambio de estructura en la forma de enseñanza-aprendizaje, muchos migraron y fortalecieron sus plataformas LMS como Blackboard, Moodle, Adobe Content, Canvas y plataformas de videoclases usando: Cisco Webex, Microsot Teams, Google Meet, Zoom, por mencionar solo algunas, encontrando en el camino muchos retos y desafíos relacionados, principalmente, a las ventajas y oportunidades de mejora.

Esto nos da a entender cómo ha sido necesario el adaptarse a los cambios y establecer estrategias claves, retándonos a transitar de una etapa de sustitución de lo presencial por on-line, a una etapa de redefinición o transformación de la experiencia formativa aumentada con la tecnología.

¿Qué ventajas e inconvenientes supone la formación a distancia con respecto a la presencial?

Uno de los puntos a favor del e-learning es que, el centro de la experiencia formativa, es el mismo alumno. En base a él giran sesiones de motivación y se mide el nivel de interacción que desarrolla con sus compañeros y docentes, lo que le brinda espacios de aprendizaje autónomo. En segundo lugar, podemos mencionar que, de la misma forma que ya aportaba la educación a distancia tradicional, esta alternativa adoptada por el sector dada la “nueva normalidad” elimina los obstáculos geográficos, ofrece flexibilidad al alumno para organizar sus tiempos, reduce gastos de desplazamiento, permitiendo además a las instituciones ofrecer sus planes educativos a muchos más estudiantes. Desde el punto de vista de empleabilidad, la experiencia formativa on-line contribuye a formar equipos autónomos y empoderados competencias necesarias para los trabajos remotos.

En cuanto a las posibles desventajas, creo que ha marcado mucho la falta de conocimiento tecnológico y el temor al cambio. A nivel docente además ha implicado una mayor dedicación de horas para adaptar las sesiones presenciales a un modelo virtual en donde es complejo manejar, además, la motivación de los alumnos y mantener la interactividad de la formación. Por lo cual se vuelve indispensable y vital supervisar constantemente los contenidos, estableciendo espacios diferentes que permitan que todos los integrantes, es decir tanto estudiantes como docentes, colaboren en el proceso de enseñanza – aprendizaje. Con esto se vuelve imprescindible el uso de herramientas como foros, trabajos en equipo, gamificación, grupos virtuales para compartir contenidos, etc.

La experiencia formativa online demanda redefinir el sistema de acompañamiento y consejería al estudiante de tal manera que se sientan digitalmente cercanos.

¿Cuál es el grado de implementación del e-learning dentro del sector educativo? y ¿cuáles son las previsiones a futuro?

Según el informe “La educación superior a distancia en América Latina y el Caribe”, los modelos virtuales y a distancia para la educación superior han alcanzado un crecimiento de 30% interanual, mostrando números claves respecto a la presencia que viene teniendo en el sector, con lo cual muchas instituciones ya van implementando poco a poco plataformas propias y/o identificando proveedores que les permitan, junto a sus áreas de Tecnologías para el aprendizaje, implementar sus programas e-learning. Sumado a esto, es importante identificar qué nuevos perfiles profesionales pueden acompañar este proceso de transición a futuro y puedan ayudar a las instituciones a seguir innovando en un modelo que integre lo mejor del e-learning con el enfoque del estudiante en donde el líder pedagógico, esta vez desde la virtualidad, le brinde las herramientas de aprendizaje y el conductor sin lugar a dudas sea el alumno.

A nivel institucional, la innovación demanda la implementación de nuevos modelos académicos administrativos y evaluación de resultados, nuevos mercados, nuevos servicios, nuevas capacidades institucionales, nuevos procesos y nueva estructura institucional. En este contexto, considero que la situación impulsará la transformación digital del sector de forma más dinámica y para conseguirlo, citando a Lourdes Bazarra en su libro "Directivos de Escuelas Inteligentes", los líderes educativos tendrán que transformarse en “nómadas del aprendizaje” rumbo hacia un nuevo modo de entender y vivir la formación educativa.


Lucero Requejo

Autora del artículo

Lucero Requejo | Consultora - Educación y Agroindustria

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Comunicadora, especializada en Liderazgo, Recursos Humanos y Empleabilidad, con más de 10 años de experiencia en diferentes sectores como Educación, Social y en entidades del Estado. Desde la operación Lucero maneja búsquedas de Perfiles Ejecutivos y Middle Management para los sectores de Agroindustria & Educación.